Educada para alabar a Dios y destinada a embelesar a las masas, Ada Jassiel Reyes dejó atrás las imperturbables dunas de Samalayuca, dispuesta a conquistar el mundo con su reconfortante lírica.

En su camino lleno de vendables, escollos y meteoricos ascensos, la hoy exitosa vocalista y lideresa de Playa Limbo sepultó a la tímida niña cristiana de faldones largos y peinados altos para renacer en una valkiria de fuego.

Su dialogo interior no resultó facil. De noche, su corazón embravecido como el mar picado le reclamaba ocupar el lugar que le correspondía entre escenarios y reflectores. No obstante, las buenas conciencias, derivadas de un seno familiar ultraconservador, le señalaron poner sus virtudes al servicio del Altísimo por medio de la música sacra. Fue entonces cuando la guerrera dormida debió cuestionarse lo siguiente: ¿escuchar el llamado divino o morir en el intento?, ¿crucificar los anhelos de grandeza o permanecer sencilla?, ¿abandonar la patria conocida o ir en pos del destino oculto?

Hacer alquimia con música

Con apenas 17 años de edad y muchas ganas de que le pasaran cosas, aquella chica de gafas grandes, procedente de la franja fronteriza del Norte de México, emprendió vuelo hacia la Ciudad de los Palacios para volver únicamente cubierta de gloria.

Y aunque desde temprana edad demostró grandes dotes escénicas, haber actuado en montajes desde los cinco años para grandes audiencias -así como un apetito desmedido por dominar diferentes disciplinas como la danza, el patinaje, la declamación y otras-, sus miras estaban puestas en la consumación de su porvenir. Así nace Jass Reyes, la cantautora, actriz y futura guionista de teatro musical que no se arrepiente en absoluto de fugarse de casa en medio engaños y anhelos para convertirse en la rapsoda predestinada a ser.

“Tal vez la manera en que lo hice no fue la correcta, pero de otro modo no habría tenido ni el permiso o las facilidades par acariciar mi sueño”, expresa con nostalgia la risueña y coqueta mujer de casi 35 años de edad, justo el doble de tiempo que necesitó para ver materializadas sus más secretas fantasías luego de su paso triunfal por Avenida Q O La voz México.

En el presente, tanto ella como su familia han dejado atrás aquel extraño capítulo del cual -pese a todo- la joven salió ilesa. Comenta la orgullosa juarense: “Esa acción fue la más disruptiva de todas las cometidas en mi vida. Ellos confiaban en que iría a una reunión de la iglesia, pero lo cierto es que yo tenía una cita con el destino. Ahí, en medio de la incertidumbre, siempre estuvo Dios para guiarme, de otro modo no lo habría conseguido”.

“Todo lo que te venga a la mano para hacer, hazlo con empeño, porque en el sepulcro, donde te diriges, no hay trabajo ni planes ni conocimiento ni sabiduría”.

Libro del Eclesiastés 9:11

Entre dos tierras

“Aun cuando soy una eterna enamorada de mi ciudad (Juárez), distaba de todos los proyectos que tenía en mente. En ese entonces, las redes sociales no eran las plataformas que son ahora, capaces de viralizarte sin salir de casa. Para mí había dos posibilidades: desarrollarme en la escena cultural de El Paso, Texas, o de la CDMX”, recalca la morena, quien -de haber gozado de las herramientas que disponen los jóvenes en la actualidad- su historia profesional y sentimental habría sido muy distinta. Lo cierto es que el romance que vivió Jass con la Ciudad de México inició mucho antes de haberse fugado cuando pudo.

Tuvo una pequeña estancia durante su preadolescencia, junto a su madre, en la capital de la República, donde tomo clases de actuación en el CEA, Situación que permitió clarificar el sendero que debía tomar si en realidad quería volverse una estrella y vivir de su talento. Fue así: pasar por el programa televisivo Código Fama fungió de manera determinante en la entonces incipiente carrera de Jass para perfilarse como una cantante profesional de verdad.

“Hace 20 años, Juárez era un lugar tristemente célebre por la migración ilegal y los feminicidios, por lo que vivir preocupada era parte indisoluble de tu sistema como mujer. Algo que tienes presente todo el tiempo es que nunca sabes si este día será tu último; la violencia, el machismo y la inseguridad con la que se vive diariamente te roban el presente. Por ello, cuando viajé y estudié en la CDMX probé la libertad. Vamos, no es como que en esta ciudad no suceda nada, pero en contraste con mi lugar de origen, el hecho de no estar permanentemente en alerta era algo muy grato. Por otra parte, Texas me encanta debido a la conexión binacional que sentimos todos lo que vivimos en los límites de ambos territorios, pero mi intuición me colocó de este lado del mapa y realmente lo agradezco”, enfatiza la artista, mas que habituada a pensar en spanglish, componiendo para piano y guitarra desde lugares llenos de emotividad y viveza, frutos de sus raíces mixtas.

Quizá por ello, entre otras razones, Reyes, no ha dejado de ser el centro de atención desde el inicio de su carrera, cuando cautivo a los jueces de La voz Mexico al interpretar “Pienso en ti”, o ahora, en su faceta en solitario, con sencillos como “Redpill” o “El Paso”, , donde nos permite asomarnos a su vena poética sin caer enla charcutería emocional. Ademas, en paralelo, desde su llegada hace ocho años su aportación artistica a la banda tapatía Playa Limbo ha sido destacable dentro del pop mexicano al elevar al siguiente nivel los éxitos de la famosa agrupación -entre los que se cuentan “Así fue” o “Mi perdición”-, distanciándose de la interpretación de su otrora vocalista María León.

Su rango sonoro, junto con su hechizante presencia escénica, le ha permitido vincularse a diversos públicos al moverse entre subculturas y nichos, sin ser farsica o turista ante tales públicos. “Tu yo auténtico va más allá de lo que haces para ganarte la vida, tus posesiones o quién eres para otros. Eres lo que vibras”, expresa la chihuahuense, quien tiene la gran capacidad de comprender lo mismo la cultura urbana chola que la regional vaquera, la evangélica y -desde luego-la artística en su formato más encorsetado, vía la industria del entretenimiento.

Desde chica ha estado en contacto con diversas sociedades que la han cincelado como una mujer de mundo. Quizá el paso natural era convertirse en un avatar de los outlanders de aquí y de todas partes.

“La música es un don divino, no puede permanecer confinada. Lo sonoro y lo silente son reveses de la vida misma”.

Sé memorable

“Es mejor estar cansada por trabajar demasiado que demasiado cansada por buscar trabajo. Cuando lo ves así, todo se vuelve muy satisfactorio”, nos comparte Jass al preguntarle si volvería al reino de los musicales. Y es que la también compositora de temas para Yuri, Reik o Edith Márquez no descarta la posibilidad de regresar a la comedia musical, pero ahora como dramaturga, sobre un tema que le es alb-solutamente familiar: monachopsis (la sensación de no pertenecer a ningún lugar en específico). “Pienso en todas aquellas personas que dejamos el hogar por un futuro mejor. Si bien la nostalgia nos invade con agudeza, los bríos de ir más lejos son mayores al miedo de permanecer en nuestro sitio, el cual a veces tampoco nos corresponde. Hay que salir a ganarse el espacio propio”.

Recordemos que esta activista por los derechos de los migrantes entró por la puerta grande del estrellato al compartir escenario con grandes luminarias de su generación, como Luis Gerardo Méndez y Karla Souza en Avenida Q, obra desarrollada por los ganadores del premio Tony, Jeff Whitty, Robert Lopez y Jeff Marx. Allí, personajes de carne y hueso -junto a títeres al más puro estilo Plaza Sesamo- narran lo tedioso que es ser un adulto joven con grandes sueños y cero centavos en un barrio marginal, cuestión que no le es indiferente a la histriona. “Cuando eres estudiante foráneo pasas por muchas estrecheces. No obstante, todo ello adereza tus días”, recuerda candidamente Reyes.

“Me queda claro que las tablas con las que te formas en el teatro no te lo brinda ninguna otra área de espectáculo. Esta industria se sustenta en las actuaciones en vivo. Como artista se comprueba tu rendimiento y habilidades frente al público, no detrás del estudio de grabación o el set filmográfico, sino en directo”, admite

Jass, a quien no le bastan las horas del día para completar todo lo que su cabecita loca tiene por ofrecer. “A veces desearía clonarme para realizar todo lo que me propongo. Además de componer, cantar y actuar, quiero dedicarme a otras funciones, como dar conferencias, impartir clases o descubrir talentos. Siempre he tenido olfato para encontrar vetas de oportunidades o personas virtuosas en todas partes”, confiesa la también admiradora de John Williams y Hans Zimmer, quien comparte que el cine es otra de sus grandes pasiones. De ser posible, le encantaría realizar la banda sonora de alguna película e incursionar como guionista, gusto que adquirió a temprana edad al asistir puntualmente con su familia al cine cada semana, los miércoles de 2×1, en su tierra natal.

“La música te suspende en el tiempo, una buena pieza te vuelve inmortal como artista y un iluminado como oyente”

Stella Maris

Tal como sucede entre los navegantes y los marineros que se encomiendan a la virgen de la Madonna antes de zarpar, pescar o llegar a buen puerto, así los integrantes de Playa Limbo -Jorge Corrales, Servando Yáñez y Angel Baillo-depositaron su total confianza en Reyes al otorgarle la posibilidad de componer canciones para ellos y también la posibilidad de completar el cuarto punto cardinal que la agrupación requería.

Si bien no todo ha sido vino y rosas en esta casi década de trabajo en conjunto, ganarse la confianza de sus seguidores más antiguos y sumar nuevos fans, sesión tras sesión, es una labor constante que Jass logra por mérito propio. “Para mí, el público más difícil ha sido el que creció con la banda, pues ellos tienen el precedente de otra vocalista. No obstante, cuando salgo a escena, la entrega es mutua, hago valer su tiempo y dinero al darles el espectáculo que se merecen. Así hemos podido seguir vigentes”, afirma la intérprete, quien recientemente acaba de realizar su primer Metropolitan con existencias totalmente agotadas. Reyes sostiene que, a pesar del tiempo juntos, sigue sin perder la sensación de estar en su primer día de gira con sus compañeros musicales.

La mejor parte es que Playa Limbo ha evolucionado a niveles insospechados.

Tan solo en los últimos años cuentan con más de 600 millones de visualizaciones en YouTube, dos discos de oro, casi dos millones de oyentes mensuales y una huella profunda en la escena musical local. Suman así una nueva insignia: sonar como nunca gracias a su nuevo productor, Pablo Stipicic, mente maestra detrás de celebridades como Daniella Spalla, Javiera Mena y Camilo entre otros, desafiando el sonido e imagen habitual de la querida banda tapatía.

Por si aquello fuera poco, Playa Limbo festeja 20 años de trayectoria al preparar una gira por Centroamérica y resto de la República mexicana. Los experimentados músicos y la diva de Juárez esperan seguir escribiendo copiosos y excitantes capítulos alrededor de su historia melódica.

Confabulario de Jazz Reyes

¿Qué género no te atrae en absoluto?

Los corridos. Sé que soy chihuahuense y estos son habituales en el Norte de México, solo que la sobreexposición al ritmo aturde. Tengo presente aquello de “Nunca digas nunca”, pero no es algo con lo que me identifique.

¿Tú y la improvisación son uno mismo o lo evitas lo más posible?

Me encanta. Siento que es el momento de sacar la casta como creativo frente a mis herramientas: piano, papel y pluma.

¿La industria musical respeta a las mujeres o se sirve de ellas más bien?

Es complicado de responder por todo lo que se ve diariamente, pero tristemente debo admitir que primero se sirve de ellas para luego hacerlas respetar y en consecuencia respetables.

Para ti ¿qué es -y qué no es- una mujer?

Somos el balance entre fortaleza y creación, es decir, diosas y guerreras.

En contraposición, una fémina, bajo mi perspectiva, jamás será una muñeca inmóvil, como nos quieren hacer ver. El mundo era nuestro y nos lo arran-caron; desde entonces, debemos ganarnos el espacio que al principio era nuestro. Es duro, pero es lo que toca. Lo digo desde mi propia experiencia.

Me he ganado mi lugar en una banda con tres hombres en una industria musical donde hoy siguen imperando los varones y sus valores.

¿Cuál te gustaría que fuera tu última canción, si te retirases algún día?

De momento no lo sé, pero desearía evocar en el público la sensación de dejarlos con ganas de vivir, de sentir plenamente. Lo comento porque soy una persona con emociones a flor de piel. Sería fantástico que, cuando la gente escuchara esa última canción mía, se encendiera su vitalidad, como me sucede al oír “Live and Let Die”, de Paul McCartney.

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Estrella: Jass Reyes
Fotografías: Teba Rodríguez
Peinado y maquillaje: Yanel Rogo
Estilismo: Michel Medina Martínez
Texto: Carolina M. Payán
Corrección de Estilo: José Antonio Blasco