El solsticio de Regina

Jan 13, 2025 | Destacado

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Sofisticación urbana

El desfile Otoño/Invierno 2025 de Michael Kors se presentó en un escenario único y evocador: el histórico Terminal Warehouse en Chelsea, Nueva York, un espacio que alguna vez albergó el icónico Tunnel Nightclub de los años 90

Herencia, comunidad y autoexpresión

Bajo la dirección creativa de Stuart Vevers, Coach, la marca de lujo estadounidense presentó una reinterpretación contemporánea de los clásicos americanos, fusionando la herencia de la marca con un compromiso de sostenibilidad y un fuerte enfoque en la autoexpresión.

De regreso

Más de tres años después de revolucionar el mundo de la moda, Crocs trae de vuelta una de sus siluetas más audaces: la BAE Clog. Con el mismo diseño icónico que conquistó el street style y ese toque de irreverencia que la hace imposible de ignorar.

Soñar en grande

American Eagle presenta con orgullo su colaboración con la celebridad digital Domelipa en la campaña “Dream in AE ft Domelipa”, una propuesta fresca y vibrante que invita a los jóvenes a reimaginar su estilo, explorar nuevas posibilidades y vivir plenamente cada momento

Enamorados

Pandora celebra el amor auténtico con su nueva campaña Be Love, una propuesta especial para este Día de San Valentín, que se distingue por presentar parejas y amigos de la vida real como protagonistas

Furor olfativo

Jil Sander, la emblemática marca de lujo conocida por su estilo minimalista y su manifiesto de “menos es más”, da un paso audaz en su expansión con el lanzamiento de su propia línea de fragancias premium

Hora de decir adiós

Kim Jones anuncia su salida de Dior Homme, dejando atrás un legado que transformó la imagen de la marca y la alta costura contemporánea. Su salida, aunque esperado por algunos, representa el final de una era en la que la sofisticación y la vanguardia se fusionaron bajo su dirección creativa

Destellante

Gentle Monster ha comenzado el 2025 con una explosión de estilo de la mano de Jennie de BLACKPINK. La famosa marca de gafas, siempre a la vanguardia en diseño, ha lanzado una nueva colección de gafas que fusiona la sofisticación de la joyería con la innovación en eyewear

Mademoiselle doble C

Llega una campaña que fusiona arte, moda y la esencia de la libertad personal. En esta ocasión, la cantautora y fashion icon Dua Lipa se convierte en el rostro del nuevo bolso CHANEL 25, una pieza que reinventa los códigos clásicos de la Maison con una modernidad fresca y sofisticada.

La revolución de un legado en ruinas

Cuando Jonathan Anderson asumió las riendas de Loewe en 2013, pocos habrían imaginado que la casa de lujo española, conocida por su clásica sobriedad y su maestría en marroquinería, se transformaría en el terreno de juego de una visión radicalmente diferente

Furtiva como el paso de la luna entre las estepas de la noche, Regina Pavón marcha sin reserva y con belleza entre la espesura del costumbrismo. La joven de 26 años se rehúsa a entrar en el molde de la normatividad sin más intención que reafirmarse a sí misma.

“Nos asusta terriblemente lo diferente, aquello que tiene más capas de lo esperado, lo que no es sencillamente mensurable por el ojo o la mano”

Ritmo del tiempo

Blanco/Negro: así de binarios somos.

Nos cuesta tanto ver, apreciar y descubrir la gama infinita de grises.

Una paleta que no tiene fin.

¿Cuántos de nosotros hemos limado nuestros bordes para encajar en lugares, momentos y grupos que muy seguramente no nos merecían? Mancillamos nuestra personalidad para sobrevivir, pareciera quizá el único el camino a seguir, pero el precio casi siempre es muy alto. El retorno de lo real nos evidencia, más tarde que temprano, que fingir lo que no somos se torna tan insostenible como lamentable.

No obstante, hay quienes encuentran entre lo oculto, complejo e inclusoestremecedor, sensaciones estimulantes para hacer de su vida un torbellino a su paso.

Muerta de ansiedad, pero con unas ganas inenarrables de hacer cosas, la actriz originaria de la Ciudad de México con raíces alemanas, Regina Pavón, ve de frente al peligro sin encogerse. No le importa tener que pasar largos días en ayuno o aislamiento para construir papeles fuertes como el que interpretó en la bien lograda serie de Netflix, Monarca, producida por Salma Hayek. Allí, la histriona –para dar a luz a a Lourdes Carranza– decidió evitar los lugares comunes desde los cuales se describe habitualmente al drogadicto y su psiquis. Pavón dio un paso más allá al despojarse de todo prejuicio ulterior para encontrar la voz de su personaje desde lugares mucho más enriquecedores y poco explorados: el vértigo, la corporalidad y el silencio. Estos la hicieron reflexionar sobre los abismos que las personas frecuentemente experimentamos, pero que solemos encubrir con diversiones o cualquier otro tipo de conducta evasiva para no examinarnos a cabalidad.

Pavón/Carrasco son dos rostros de una misma moneda como lo es Perséfone, diosa de la primavera y reina del inframundo. Mujeres fuertes que le exigieron más a su cuerpo y a la vida. Opuestos que coexisten en un mismo ser sin perturbarse entre sí.

La sinceridad duele, Regina afirma, más no castiga.

Dentro y fuera del camerino

Entre bocanadas de humo, la también intérprete de Ella en la puesta en escena 7 veces adiós, deambula entre cambio y cambio para darse valor a la hora de mostrarse ante el rugido de los flashes. La cámara la ama. Sus ojos son una invitación provocadora a mirarla con detenimiento. Casi como un felino se balancea desde las copas de los árboles acechando/seduciendo por igual…

Atenta, se incorpora entre toma y toma dejándose llevar por el ritmo del rap que tanto le gusta, haciéndola sentir como un maestro de ceremonias que disfruta del improviso. Regina sabe que entre sus versos, pautas y compases existe un vehículo sonoro, para los que –como ella– son voces disidentes que no soportan que les digan cómo hacer su trabajo.

“Vengo de una crianza muy rígida. Mi padre era ingeniero alemán, un hombre muy metódico que valoraba la precisión ante todo. No obstante, mi madre es tan espontánea como flexible; lo mismo ha sido azafata de Aeroméxico que asesora de bienes raíces o maestra de inglés. Considero que tanto mi hermana como yo somos el balance perfecto de dichos extremos”, comenta la pelirroja, quien a la hora de actuar en series, películas y teatros lo hace llegando al plateau sin titubeos, teniendo en mente montar y no memorizar como otros colegas de oficio suelen hacer.

“No me gusta que me hagan perder mi tiempo, por eso no lo hago con el de los demás”, enfatiza la también admiradora de Woody Allen. Ve en el mítico realizador neoyorkino un estilo acompasado en cuanto a disciplina en el mise-en-place, sin perder la febrilidad del momento en su vida íntima.

Con ocasión a lo anterior, la joven confiesa: Annie Hall me fascina como película. Es un gran espejo de las personalidades obsesivas de Keaton como de Allen. Su peculiaridad y agudeza son cosas con las que me identifico, incluida la dinámica de pareja entre ellos”. Pavón no ha temido probar de los labios de hombres y mujeres el néctar precioso que sacie su curiosidad a la hora de amar. Y es que al igual que muchos de los personajes femeninos del icónico cineasta de Brooklyn, Pavón encarna –a su manera– rasgos compartidos con Jasmine Francis, Sophie Baker o María Elena, mujeres caóticas, dominantes e irremediablemente interesantes.

Cuando le preguntamos a Regina si se consideraba plena o si alguna vez dentro de la enceguecedora industria del entretenimiento le habían solicitado transformarse para verse como tal o cual, la veinteañera respondió: “Cada historia requiere su caracterización, no me importa teñir mi pelo, modular la voz, subir o bajar de peso por un papel, es parte de la magia de encarnar roles. Pero de eso a querer ser alguien más o compararme con otra, no lo permito. A menudo, la prensa nos quiere equiparar a una actriz con otra, pero la realidad es que escuchar esos comentarios solo carcome tu trabajo interior”.

La protagonista de Dulce obsesión ha sido muy consciente que temas como la sororidad y empatía son indispensables a la hora de trabajar en producciones de todo tipo.“Es hermoso llegar a un lugar donde tienes compañeros que te cobijen simplemente por el gusto de hacer más llevadero el lugar de trabajo”, sostiene Pavón.

Recientemente terminó de grabar Las hermanas Guerra, junto a otra gran actriz de su generación, Ana Valería Becerril, con quien posee una excelente relación.

La también entusiasta de la dirección no niega que conductas nocivas, tales como ser exigente o tener álgidas enemistades con tus compañeros del set, son parte de la historia del medio de la farándula, mismas que han traspasado los muros en forma de expresiones populares como “Tiene temperamento de vedette” o “Se comporta como diva”, haciendo alusión a aquellos años del viejo Hollywood.

No es bueno, ni malo: es tuyo

Ya en un ámbito de complicidad entre Regina y nosotros, después de una serie de múltiples cambios y retoques de maquillaje y pelo sentimos la confianza suficiente de preguntarle qué consejo compartiría con otros que aspiran a pertenecer al showbiz, y la histriona dijo:

“No vayas por el oro o la gloria, ve por lo verdadero”

Y aunque no es una de las frases que lleva tatuadas sobre su cuerpo como otras que recorren sus brazos –otorgadas por sus grandes maestros de vida–, ir por lo verdadero ha sido la gran brújula para tomar o rechazar papeles, como muchas otras celebridades de su generación que iniciaron su carrera en medio de los capítulos de La rosa de Guadalupe o en telenovelas. Con ocasión de lo anterior, Regina comenta: “Muchos productores o directores de cine y tele no te van a tomar en serio porque estuviste en proyectos que, en su perspectiva, no significan nada. Pero lo cierto es que no existe un papel pequeño en el mundo de la actuación; la superposición de capas hacen el entramado fino”. Con cariño recuerda lo que unaprofesora de la carrera le decía una y mil veces: “No es bueno, ni malo: es tuyo”.

Pavón no ha hecho otra cosa que trabajar por lo que quiere. Nos advierte que si bien todo comienzo es por principio rocambolesco, mantenerse activo es lo que cuenta. “Algo que nos cuesta reconocer a los actores es que el poder de una crítica sí influye en tu portafolio; no importa que el público haya amado la producción o que haya sido récord de taquilla. Si tu papel no convence a la prensa especializada o la gente adecuada, corres el riesgo de que te encasillen o que no participes en otra clase de productos audiovisuales”, reflexiona la estrella de Los artistas, primeros trazos, serie basada en la pieza de la escritora española María Dueñas, la cual fue muy bien recibida por la audiencia, pero no así por la prensa. Y aunque tenía todo para ganar como un guion sólido, actuaciones destacadas y un largo etcétera, se desconoce si habrá o no segunda temporada de la misma.

Por todo esto, disfrutar del proyecto sin importar su tamaño o duración, así como la entrega cual si fuera tu último montaje, sin olvidar la irrenunciable autenticidad con la que naciste y formaste, serán los andamios para colocarte aquí y allá. Así nos lo da entender Regina, quien imperturbable inhala una vez más el humo de su cigarrillo electrónico antes de brindar los tiros finales e irse a Coyoacán, su querido barrio al Sur de la Ciudad de México, donde la esperan impacientemente tres mininas de ojos grandes como los de ella, a las que adora como hijas.

Estrella REGINA PAVÓN Fotografías DIEGO ZUBIETA Estilismo MICHEL MEDINA MARTÍNEZ Texto CAROLINA M. PAYÁN Peinado y maquillaje YANEL ROGO Corrección de estilo JOSÉ ANTONIO BLASCO C.

Furtiva como el paso de la luna entre las estepas de la noche, Regina Pavón marcha sin reserva y con belleza entre la espesura del costumbrismo. La joven de 26 años se rehúsa a entrar en el molde de la normatividad sin más intención que reafirmarse a sí misma.

“Nos asusta terriblemente lo diferente, aquello que tiene más capas de lo esperado, lo que no es sencillamente mensurable por el ojo o la mano”

Ritmo del tiempo

Blanco/Negro: así de binarios somos.

Nos cuesta tanto ver, apreciar y descubrir la gama infinita de grises.

Una paleta que no tiene fin.

¿Cuántos de nosotros hemos limado nuestros bordes para encajar en lugares, momentos y grupos que muy seguramente no nos merecían? Mancillamos nuestra personalidad para sobrevivir, pareciera quizá el único el camino a seguir, pero el precio casi siempre es muy alto. El retorno de lo real nos evidencia, más tarde que temprano, que fingir lo que no somos se torna tan insostenible como lamentable.

No obstante, hay quienes encuentran entre lo oculto, complejo e inclusoestremecedor, sensaciones estimulantes para hacer de su vida un torbellino a su paso.

Muerta de ansiedad, pero con unas ganas inenarrables de hacer cosas, la actriz originaria de la Ciudad de México con raíces alemanas, Regina Pavón, ve de frente al peligro sin encogerse. No le importa tener que pasar largos días en ayuno o aislamiento para construir papeles fuertes como el que interpretó en la bien lograda serie de Netflix, Monarca, producida por Salma Hayek. Allí, la histriona –para dar a luz a a Lourdes Carranza– decidió evitar los lugares comunes desde los cuales se describe habitualmente al drogadicto y su psiquis. Pavón dio un paso más allá al despojarse de todo prejuicio ulterior para encontrar la voz de su personaje desde lugares mucho más enriquecedores y poco explorados: el vértigo, la corporalidad y el silencio. Estos la hicieron reflexionar sobre los abismos que las personas frecuentemente experimentamos, pero que solemos encubrir con diversiones o cualquier otro tipo de conducta evasiva para no examinarnos a cabalidad.

Pavón/Carrasco son dos rostros de una misma moneda como lo es Perséfone, diosa de la primavera y reina del inframundo. Mujeres fuertes que le exigieron más a su cuerpo y a la vida. Opuestos que coexisten en un mismo ser sin perturbarse entre sí.

La sinceridad duele, Regina afirma, más no castiga.

Dentro y fuera del camerino

Entre bocanadas de humo, la también intérprete de Ella en la puesta en escena 7 veces adiós, deambula entre cambio y cambio para darse valor a la hora de mostrarse ante el rugido de los flashes. La cámara la ama. Sus ojos son una invitación provocadora a mirarla con detenimiento. Casi como un felino se balancea desde las copas de los árboles acechando/seduciendo por igual…

Atenta, se incorpora entre toma y toma dejándose llevar por el ritmo del rap que tanto le gusta, haciéndola sentir como un maestro de ceremonias que disfruta del improviso. Regina sabe que entre sus versos, pautas y compases existe un vehículo sonoro, para los que –como ella– son voces disidentes que no soportan que les digan cómo hacer su trabajo.

“Vengo de una crianza muy rígida. Mi padre era ingeniero alemán, un hombre muy metódico que valoraba la precisión ante todo. No obstante, mi madre es tan espontánea como flexible; lo mismo ha sido azafata de Aeroméxico que asesora de bienes raíces o maestra de inglés. Considero que tanto mi hermana como yo somos el balance perfecto de dichos extremos”, comenta la pelirroja, quien a la hora de actuar en series, películas y teatros lo hace llegando al plateau sin titubeos, teniendo en mente montar y no memorizar como otros colegas de oficio suelen hacer.

“No me gusta que me hagan perder mi tiempo, por eso no lo hago con el de los demás”, enfatiza la también admiradora de Woody Allen. Ve en el mítico realizador neoyorkino un estilo acompasado en cuanto a disciplina en el mise-en-place, sin perder la febrilidad del momento en su vida íntima.

Con ocasión a lo anterior, la joven confiesa: Annie Hall me fascina como película. Es un gran espejo de las personalidades obsesivas de Keaton como de Allen. Su peculiaridad y agudeza son cosas con las que me identifico, incluida la dinámica de pareja entre ellos”. Pavón no ha temido probar de los labios de hombres y mujeres el néctar precioso que sacie su curiosidad a la hora de amar. Y es que al igual que muchos de los personajes femeninos del icónico cineasta de Brooklyn, Pavón encarna –a su manera– rasgos compartidos con Jasmine Francis, Sophie Baker o María Elena, mujeres caóticas, dominantes e irremediablemente interesantes.

Cuando le preguntamos a Regina si se consideraba plena o si alguna vez dentro de la enceguecedora industria del entretenimiento le habían solicitado transformarse para verse como tal o cual, la veinteañera respondió: “Cada historia requiere su caracterización, no me importa teñir mi pelo, modular la voz, subir o bajar de peso por un papel, es parte de la magia de encarnar roles. Pero de eso a querer ser alguien más o compararme con otra, no lo permito. A menudo, la prensa nos quiere equiparar a una actriz con otra, pero la realidad es que escuchar esos comentarios solo carcome tu trabajo interior”.

La protagonista de Dulce obsesión ha sido muy consciente que temas como la sororidad y empatía son indispensables a la hora de trabajar en producciones de todo tipo.“Es hermoso llegar a un lugar donde tienes compañeros que te cobijen simplemente por el gusto de hacer más llevadero el lugar de trabajo”, sostiene Pavón.

Recientemente terminó de grabar Las hermanas Guerra, junto a otra gran actriz de su generación, Ana Valería Becerril, con quien posee una excelente relación.

La también entusiasta de la dirección no niega que conductas nocivas, tales como ser exigente o tener álgidas enemistades con tus compañeros del set, son parte de la historia del medio de la farándula, mismas que han traspasado los muros en forma de expresiones populares como “Tiene temperamento de vedette” o “Se comporta como diva”, haciendo alusión a aquellos años del viejo Hollywood.

No es bueno, ni malo: es tuyo

Ya en un ámbito de complicidad entre Regina y nosotros, después de una serie de múltiples cambios y retoques de maquillaje y pelo sentimos la confianza suficiente de preguntarle qué consejo compartiría con otros que aspiran a pertenecer al showbiz, y la histriona dijo:

“No vayas por el oro o la gloria, ve por lo verdadero”

Y aunque no es una de las frases que lleva tatuadas sobre su cuerpo como otras que recorren sus brazos –otorgadas por sus grandes maestros de vida–, ir por lo verdadero ha sido la gran brújula para tomar o rechazar papeles, como muchas otras celebridades de su generación que iniciaron su carrera en medio de los capítulos de La rosa de Guadalupe o en telenovelas. Con ocasión de lo anterior, Regina comenta: “Muchos productores o directores de cine y tele no te van a tomar en serio porque estuviste en proyectos que, en su perspectiva, no significan nada. Pero lo cierto es que no existe un papel pequeño en el mundo de la actuación; la superposición de capas hacen el entramado fino”. Con cariño recuerda lo que unaprofesora de la carrera le decía una y mil veces: “No es bueno, ni malo: es tuyo”.

Pavón no ha hecho otra cosa que trabajar por lo que quiere. Nos advierte que si bien todo comienzo es por principio rocambolesco, mantenerse activo es lo que cuenta. “Algo que nos cuesta reconocer a los actores es que el poder de una crítica sí influye en tu portafolio; no importa que el público haya amado la producción o que haya sido récord de taquilla. Si tu papel no convence a la prensa especializada o la gente adecuada, corres el riesgo de que te encasillen o que no participes en otra clase de productos audiovisuales”, reflexiona la estrella de Los artistas, primeros trazos, serie basada en la pieza de la escritora española María Dueñas, la cual fue muy bien recibida por la audiencia, pero no así por la prensa. Y aunque tenía todo para ganar como un guion sólido, actuaciones destacadas y un largo etcétera, se desconoce si habrá o no segunda temporada de la misma.

Por todo esto, disfrutar del proyecto sin importar su tamaño o duración, así como la entrega cual si fuera tu último montaje, sin olvidar la irrenunciable autenticidad con la que naciste y formaste, serán los andamios para colocarte aquí y allá. Así nos lo da entender Regina, quien imperturbable inhala una vez más el humo de su cigarrillo electrónico antes de brindar los tiros finales e irse a Coyoacán, su querido barrio al Sur de la Ciudad de México, donde la esperan impacientemente tres mininas de ojos grandes como los de ella, a las que adora como hijas.

Estrella REGINA PAVÓN Fotografías DIEGO ZUBIETA Estilismo MICHEL MEDINA MARTÍNEZ Texto CAROLINA M. PAYÁN Peinado y maquillaje YANEL ROGO Corrección de estilo JOSÉ ANTONIO BLASCO C.